Desde que la Madre General de las Hijas de María Auxiliadora, Sor Yvonne Reungoat, aterrizara en el aeropuerto de Santiago de Compostela el 9 de marzo, el cariño y la acogida se manifestaron en su rostro allá por los lugares que visitó en la Inspectoría “Virgen del Camino” de León y de “Santa Teresa” de Madrid.
En los últimos días, la visita de la Madre se centró en las casas de Madrid. El viernes 14 de marzo por la mañana, Sor Yvonne Reungoat acudió al colegio salesiano de Majadahonda. Allí dijo: “Estoy muy contenta de estar con vosotros”. Por la tarde, llegó al colegio de Aravaca, donde fue recibida por alumnos, padres, profesores y Salesianas con un cartel en el teatro que decía “nuestra casa es tu hogar”. Sor Yvonne regresó al Colegio del Plantío que es la sede de diversos encuentros que va a tener con los miembros de la Familia Salesiana, las Hermanas y los grupos de Nuevas rutas en estos días.
El sábado 15 fue recibida por la casa “Sor Eusebia” de El Plantío (Madrid). La agenda de la Madre General estuvo cargada de acontecimientos los días posteriores. El domingo 16 de marzo varios grupos componentes de la FASA y miembros de las comunidades educativas de las casas de Madrid, se encontraron con Madre Yvonne. Agradeció a los grupos de la FASA y comunidades educativas su presencia en los 5 continentes y les instó a conseguir una educación integral más plena: “Estamos viviendo cambios muy rápidos en lo social, por eso es necesario que creemos sinergias para poder incidir en las nuevas generaciones para suscitar esperanza en un futuro abierto donde se vivan los valores que el Señor nos invita a vivir, es por esto por lo que el movimiento salesiano es tan necesario y es tan válido para los jóvenes, como en tiempos de Don Bosco”.
El lunes 13 las Hijas de María Auxiliadora de las Inspectorías de León y Madrid tuvieron un encuentro en el salón de actos de la casa de El Plantío. Allí, Sor Yvonne invitó a las Hermanas a "observar con una mirada de amor y de confianza el momento histórico actual del mundo, de la Iglesia, del Instituto. ¡Cultivar una mirada creyente!". Además, añadió que "el Instituto hoy siente la necesidad de ser casa... la casa es un ambiente donde el espíritu de familia, que es el amor del Sistema Preventivo, que se traduce en toda nuestra misión... un ambiente donde se pueda hacer experiencia que es verdad que Dios es amor". Concluyó alentándolas a "ser felices buscando caminos y encontrando medios, a pesar de muchas dificultades, para ir respondiendo a las necesidades de los jóvenes".
